Nada te impide acércarte a Dios
Se acerca para todos los creyentes una época muy especial en la cual conmemoramos la crucifixión y resurrección de Jesucristo. De una u otra forma, la historia de Jesús es una de las más reproducidas y es probable que todo el mundo, cristianos o no, conozcan los principales sucesos que marcaron la vida de toda la humanidad.
Jesús fue el Mesías que, rechazado por su pueblo, murió crucificado cargando los pecados de toda la humanidad para luego, al tercer día, resucitar. Era necesario que el muriese para así limpiar de pecados a la humanidad, pero hubo un acontecimiento que muchas veces pasa desapercibido y es considerablemente importante, ya que cambió por completo la historia de la humanidad.
Más Jesús, habiendo otra vez clamado a gran voz, entregó el espíritu.
Y he aquí, el velo del templo se rasgó en dos, de arriba abajo; y la tierra tembló y las rocas se partieron;
San Mateo 27:50-51
La muerte de Jesús también cambió la forma en que el Pueblo de Dios tenía acceso a él y eso es lo que fue representado a través de la ruptura del velo del templo.
El velo del templo fue indicado por Jehová, cuando dió instrucciones a Moisés acerca de como debía ser construido el Tabernáculo, según relata en Éxodo 26. El propósito del velo era de separar el lugar Santo del lugar Santísimo. Es decir, reservaba el Lugar Santísimo para que no tuviera libre acceso, quedando de esta manera restringido el ingreso únicamente para el Sumo Sacerdote. Pero la muerte de Jesús rompió ese velo por completo, haciendo que todos tengamos libertad de acercarnos a Dios para seguir sus pasos. Pero, ¿qué significa acercarse a Dios?
Acercarse a Dios significa procurar vivir una vida conforme a su voluntad; es decir, una vida que implique incluso renunciar a nuestras pasiones terrenales para buscar primeramente las cosas de arriba. Es anteponer la búsqueda del amor, el gozo y la fe, antes que la búsqueda de riquezas, bienes o gloria humana; es preocuparse por compartir el pan en paz y en comunión antes que tener grandes banquetes en discordia. Se trata de llevar una vida diferente, en un camino distinto al que sigue el mundo.
No hay barreras ni impedimentos para acercarse a Dios: el velo se rompió y todas las personas pueden iniciar hoy su relación con Dios. Con una pequeña oración basta para conversar con él y empezar a dar los primeros pasos en sus caminos. Si lo hacen, podrán gozar de grandes beneficios que Dios reservó para aquellos que confíen en Él. Los creyentes podrán ver la bondad de Dios en sus vidas y gozar de su amor.
De esa forma, los creyentes estarán honrando el sacrificio que Cristo hizo en la cruz por ellos. La sangre que Cristo derramó no será en vano y ese sacrificio vivo que Jesús realizó se verá reflejado en todos aquellos que se laven en ella; y Dios promete que los que vivan cerca de Él, no tendrán falta de ningún bien, no perecerán, sino que tendrán vida eterna y serán llenos del Espíritu de Dios.